LA SOMBRA DEL VIENTO

Aunque aún no lo he acabado he de decir que todo lo que puedes esperar de una novela, ésta,lo tiene. Tras largos viajes e innumerables horas de tren, he descubierto el mundo desde los últimos esplendores del Modernismo hasta las tinieblas de la postguerra española del siglo XX. La vida de Julián Carax ya es un misterio; Daniel, el protagonista, le da un carácter especial a la novela, que junto con el increible ingenio de Fermín, compañero de fatigas y gran consejero, hacen que tales o cuales escenarios permanezcan siempre en la más intrínseca de las historias que te envuelven rápidamente sin que tu consciencia pueda darse cuenta.
¿Bea y Daniel? ¿Julián y Penélope? Son acaso la misma historia que se repite en un marco temporal diferente? ¿Es casualidad que Daniel y Carax tengan un gran parecido?
Muchas veces el tren se hace pesado e inaguantable pero, ahora, es la única salida a mi gran dilema, mi único dilema. Viajar sin otra compañía que la de Carlos Ruiz Zafón (todo un maestro, hoy en día, del arte de la literatura y dominio de nuestra lengua) es más que agradable.